Prometeo sin homosexualidad
Luego de un éxito rotundo en taquilla el pasado mes de octubre en su estreno nacional, Prometeo Deportado, prometió gustar a todos y así fue. Como no era de esperarse, hubo mucha espectativa por querer ver la película dirigida por el guionista guayaquileño Fernando Mieles, sobre todo por saber de qué se trataba la cinta. El trailer encantó a muchos y hasta causó emoción al ver esas imágenes rápidas, en diferentes planos y ángulos, dististas historias, ritmo musical, en fin; la película quería dejarse ver. Y como si se tratase de una realidad, Prometeo intenta acercarse a ella. Una realidad para muchos calificada como verdadera y para otros etiquetada como posible. Como todo ecuatoriano que tiene ese anhelo de salir de su país para ser empleado de los extranjeros, Fernando Mieles intenta mostrar una semejanza entre el verdadero emigrante y los que viajan por querer ser mejores que otros. Sin embargo, quizá la idea de Mieles no sea acercarse a la realidad como hecho migratorio o fenóme