Sin Rabo de Paja 2

Rafael Correa, Rolando Panchana y Jaime Nebot, los principales protagonistas del tema de los puentes que unan a Guayaquil. El tira y hala de algunos funcionarios del Gobierno Nacional y de los alcaldes de Guayaquil, Daule y Samborondón sobre la construcción de los puentes que unan a estos tres cantones, ha sido un tema que ha generado mucho interés mediático no porque haya una respuesta en concreta sino por los dimes y diretes. Por un lado, Jaime Nebot, alcalde de Guayaquil, defiende su proyecto de que se construirán dos puentes que unan Samborondón y Daule con Guayaquil y que será financiado conjuntametne con sus colegas José Yúnez (Samborondón) y Pedro Salazar (Daule).  [Lee: ¡Guayaquil en segunda! ] Por otro lado, aparece el Gobierno Nacional. Aquí saltan varias figuras, desde el presidente de la república, Rafael Correa, la ministra de Obras Públicas, María de los Ángeles Duarte y el gobernador del Guayas, Rolando Panchana, quien funge como "mediador". Este grupo propone

Por: Kaybett Ayala Quito - Ecuador Todo comenzó un miércoles por la tarde, aburridos por las vacaciones entre un grupo de amigos propusimos la idea de hacer un viaje grupal, entre tantos destinos por elegir optamos por ir a la Laguna del Quilotoa ubicada en la provincia de Cotopaxi, en Ecuador. La aventura empezó a las 06:00 en el Terminal de Quitumbe (Quito), compramos los pasajes para Latacunga y nos embarcamos en el bus cinco minutos después.  La Laguna de Quilotoa es en realidad un volcán cuyo cráter está lleno de agua. Los minerales disueltos que contiene en los aproximadamente 300 metros de profundidad, han dado una tonalidad verdosa. Este lugar es muy concurrido por los turistas nacionales e internacionales.  Luego de una hora y media de viaje llegamos a la cuidad de Latacunga. Para acercarnos más a nuestro destino teníamos que llegar al pueblito de Zumbahua, pero el bus que nos tenía que llevar no salía sino hasta las 11:00 lo cual nos retrasaba mucho de acuerdo a lo planeado,

Reconozco que le tengo miedo a las alturas, pero cuando de hacer deportes extremos se trata, la adrenalina se ocupa de diluir esos temores. Eso me ocurrió en Baños, provincia de Tungurahua en Ecuador cuando me atreví a realizar canyoning o descenso con cabo en una montaña.  Fui con un grupo de unas 15 personas, la mayoría extranjeros. Con ellos tuve la oportunidad de poner en práctica mi inglés pero preferí hablar espanglish, ya que no hablaba inglés desde que salí del colegio (9 años).  Antes de comenzar la aventura, el guía nos dio una charla de cómo se manejan los equipos, sobre todo la cuerda y el arnés que son los principales elementos para realizar el canyoning. En la torre de ensayos que es una pared de madera montada en una estructura de hierro, comenzamos a practicar. Subimos a los 6 metros de la torre. Solo con estar arriba  y mirar hacia abajo, mis ganas de hacer esta actividad empezaban a desaparecer. La confianza del guía fue clave. "¡Arrecho, chucha!, vos eres ecuato