Ecuador necesita un cambio urgente
Puras ganas y nada más, fue lo único que pusieron los jugadores de la selección ecuatoriana de fútbol en este último partido de Copa América y lo más sobresaliente que demostró la Tri, de ahí en adelante fue una vergüenza. Una vez más queda demostrado que el alto nivel futbolístico que habíamos demostrado en los dos mundiales a los que clasificamos ya quedó en el pasado, ahora, se nota a una tricolor lenta, quemeimportista, sin amor propio a la camiseta amarilla y sin estilo de juego.
Ayer vimos a un Ecuador insistente, pero nada más. La ilusión que los 14 millones de ecuatorianos pusieron a esos 11 jugadores que planteó el DT, Reinaldo Rueda quedó simplemente como algo superfluo, casi inalcanzable desde el punto de vista de la realidad. "Hoy (Ecuador) aplica la del estudiante que quiere salvar el año en el examen final", fue un tweet que escribió Hans Behr López en alusión a lo que sería el partido frente a Brasil. Y no era de esperarse, la Tricolor el día de ayer salió en busca de aquel lejano triunfo que lo logre clasificar a la siguiente ronda de la Copa América y hacer historia "eliminando" a Brasil de un torneo internacional. Aquel anhelo se revirtió y fuimos nosotros los que nos quedamos eliminados.
¿A quién echamos la culpa de este nuevo fracaso futbolístico? Sin duda empecemos por el meollo del asunto. Yo los ordenaría de la siguiente manera:
- Luis Chiriboga Acosta.- Por haberse equivocado en contratar a un Director Técnico que vino fracasado desde su mismo país, donde no pudo clasificarla al mundial de Alemania 2006 y porque tercamente insistió en la línea colombiana. Además su continuidad en la Federación Ecuatoriana de Fútbol ha sido cuestionada y criticada por el "largo" periodo que todavía le falta presidir.
- Reinaldo Rueda.- Por ser un técnico pesimista, mediocre, perdedor y quemeimportista. No le dio prioridad a esta antesala de las Eliminatorias, como lo es la Copa América y prefirió enmendar sus errores en el camino cuando ya era demasiado tarde.
- Algunos jugadores.- El desgano con que algunos jugadores se desempeñaban en la cancha dejó mucho que desear. Era como ver un partido de muchachos vagos, que no corrían el campo de juego, desorientados, poco incisivos y hasta quizá quemeimportistas.
- Prensa deportiva.- Algunos colegas quizá me caigan encima, pero lo tengo que decir. La prensa deportiva también influenció para que la selección nacional tenga un pobre desempeño. Cuando perdían, les daban palo a punta de comentarios a los jugadores; cuando empataban decían que estaban mejorando y cuando ganaban ni se digan: ¡ellos eran los campeones del mundo!. Muchos comentaristas deportivos, sobre todo los de radio y televisión, hablaron de más al "analizar" o "criticar" constructivamente los hechos. A parte del acoso periodístico en cada concentración de la Tricolor para tener sus "exclusivas".
No hay más evidencia que todo este fracaso de la selección nacional en la era de Reinaldo Rueda. La FEF deberá analizar urgentemente la salida del técnico colombiano y reemplazarlo NO por Vizuete (él está bien en la Sub 20, es un técnico ganador con los jueveniles), NO por Fossatti, NO por Lavolpe, NO por Bauza. Chiriboga Acosta deberá cambiar el estilo de juego lento y retrógrado que ha tenido Ecuador desde el mando de Rueda.
La selección nacional necesita un técnico ganador, optimista, inteligente y motivador. Hoy por hoy, los seleccionados están con el autoestima por los suelos, debido a la mediocridad y pesimismo otorgada por Rueda. Los jugadores necesitan a alguien que los reanime y que les inyecte una dosis de amor por la camiseta, garra, coraje, arrechera y como diría Edwin Tenorio: "huevos".
Perú renovó su estilo de juego de técnicos peruanos por la del paraguayo Sergio Markarián, y ese equipo funciona. Venezuela continúa con su propia línea venezolana, de la mano de César Farías. Chile, que en su momento bajó las revoluciones después del Mundial de Francia 98, tuvo que cambiar es estilo de juego chileno por la del argentino Marcelo Bielsa y actualmente con Claudio Borghi, los araucanos son una nueva selección. Pero Ecuador desde el proceso mundialista de Francia 98, continúa con el estilo y la filosofía colombiana.
Ecuador ya no debería seguir haciendo el ridículo en sus presentaciones, ahora resulta que la Tricolor es el comodín de los equipos sudamericanos, incluso me atrevo a decir, que está por debajo de Venezuela, Perú y Colombia, equipos que hace dos eliminatorias, eran inferior a nuestro país.
Ya han pasado cerca de 16 años y es momento de que la Tricolor, cambie de aires en su manera de jugar, gustar y ganar; de seguro sus hinchas y todos los escuatorianos volveríamos a retomar las riendas de la ilusión de podernos ver en el Mundial de Brasil, el próximo 2014.
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