Los que se van
El cholo de la costa es el que vemos en el campo o en la Caraguay. El negro que vende cocada en carretilla o el afilador de cuchillos que pasa por la casa con la silbatina. El montubio tímido y sencillo, muy humilde, siempre pide disculpas cuando realiza cualquier tipo de acto. Así son ellos a los que día a día nos topamos en el bus, a los que vemos vendiendo la cola a dié, los sabrosos y sabidos que enfatizan más la 'sh' en sus diálogos que llevan s. ¿Y las cholas? Mis lindas cholas costeñas, que se menean cuando todo hombre le lanza algún piropo. Las montubias que tienen un arte culinario único y exquisito, muy trabajadoras y madrugadoras; y las negras ni se digan, valientes, guerreras, protectoras, gritonas, pero muy celosas. Así son 'Los que se van'.
Y sin darnos cuenta marginamos al humilde que más nos da o que hace más. A "ese" lo rechazamos, lo criticamos, nos burlamos y hasta nos aprovechamos de ellos. Muchas veces nos creemos superiores a esas personas, cuando en realidad quizás ellos sean mucho más inteligente que uno mismo, aunque no sea "iguales" a nosotros. En Los que se van del Grupo de Guayaquil, se encuentra eso: crueldad pero a la vez ternura, malas palabras, irrespeto a las normas gramaticales, enrredos verbales que solo "esos" montubios, cholos o negros saben qué es lo que quieren decir.
En la actualidad podemos decir que ya nos hemos acostumbrados a vivir con ellos, a tolerarlos y a acpetarlos en nuestra sociedad. Sin embargo, han aparecido otras personas con diferente cultura, rasgos, costumbres, ideologías. Están los emos, los rockeritos, los metaleros, mochileros, cantantes, literatos, nerds, playeros. Los que hacen arte, los que dicen hacerlo, los ilustrados, los ignorantes, en fin han aprecido un montón de seres a los que también de una u otra manera rechazamos y no toleramos. Pero ¿qué quieren demostrar ellos con sus comportamientos?. Para muchos quizás llamar la atención de la sociedad, otros quieren cambiar a la sociedad a punta de arte, de letras, de música, hay otros que miran a la sociedad con repudio solo por el simple hecho de no saber lo que ellos "saben". Existen también los que ignoran a la sociedad y viven sus propias vidas sin importarle lo que ocurra a su alrededor.
¿Qué provecho o beneficio aportan ellos? Hay muchos que no aportan nada, otros que solo se dedican a joder a la sociedad, a criticar los sistemas gubernamentales, a hablar de política, y a seguir criticando. A muchos todo les apesta, todo está mal, no hay nada que esté bien. ¿Podríamos decir que aportan algo positivo para la sociedad?.
Si comparamos a un negro con un emo, creo que el negro daría más alegría a pesar de esos que se visten de negro. A un cholo con un mochilero, el cholo hará lo que sabe hacer pero el mochilero se irá y no hará nada. Un montubio con un literato, el montubio sabrá muchas más historias y quizás tendrá un mayor conocimiento que el literato.
Si comparamos a un negro con un emo, creo que el negro daría más alegría a pesar de esos que se visten de negro. A un cholo con un mochilero, el cholo hará lo que sabe hacer pero el mochilero se irá y no hará nada. Un montubio con un literato, el montubio sabrá muchas más historias y quizás tendrá un mayor conocimiento que el literato.
Y han pasado 81 años de aquel legado literario que nos dieron esos escritores guayaquileños para que tengamos como punto de partida aquella búsqueda de identidad y de definición de nuestros rasgos ecuatorianos que aún no logramos encontrar.
Saquen ustedes las conclusiones de quienes son los que realmente deben irse...
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