Fotos: Museo de la Música Popular

Julio Jaramillo Laurido, es quizá uno de los más grandes artistas nacionales en cuanto a música popular. El ruiseñor de América, como también se lo conocía a este cantante guayaquileño, sigue vivo todavía en las canciones que dejó como legado a todo un pueblo que en cada esquina, en cada barrio, en cada bar, en cada taxi o bus, se escuchan todavía, sus inolvidables pasillos, cuyas letras narran vivencias que identifican a cada guayaquileño, a cada ciudadano.

Por esa razón, incluso en Guayaquil, se le ha hecho honor a su trayectoria, con la construcción del Museo de la Música Popular, Julio Jaramillo, cuyo principal objetivo es recordar su trayectoria y su vida artística, cuyos éxitos descansan en la mente de cada ecuatoriano que viven día a día en el sonar de una guitarra o el entonar de un requinto. A continuación, disfruten de este fotoreportaje.

Ingreso al Museo de la Música Popular, Julio Jaramillo, ubicado en Puerto Santa Ana, Guayaquil.

Nació en Guayaquil, el 1 de octubre de 1935. Creció en un hogar muy humilde. Fue zapatero desde pequeño y actividad que abandonó cuando el éxito se le interpuso en su camino.

Busto del Ruiseñor de América

Tocador de Long Play (LP) en la década de los 50s.

Varias estampillas postales, de Juilio Jaramillo, con fondos de países de Latinoamérica donde tuvo presentaciones exitosas.

FEDISCOS, se fundó en 1964 y fue uno de los estudios de grabación más modernos del país, por sus instalaciones. Lanza su primer disco de 45rpm en 1965.

Donde hacía sus grabaciones J.J.

"La Cantina de Pedro” era grato reducto de artistas y bohemios puros. En este sitio se reunían artistas, periodistas, deportistas, profesionales, personalidades de radio y televisión.

Varias condecoraciones que le otorgaron distintas dignidades a Julio Jaramillo.

Junto a Armando Romero Rodas, uno de los mejores radiodifusores del Ecuador. Radio Cristal, fue la plataforma artística que impulsó a Julio Jaramillo a la fama.

Algunos de los trajes que utilizó J.J.

Tanta fue la fama que tuvo Jaramillo, que incluso se presentó en Las Vegas, EE.UU.

Una representación de los famosos 'lagarteros', músicos que interpretan canciones y serenatas.

La voz del Ruiseñor se apagó el 9 de febrero de 1978. Miles de simpatizantes le dieron el último adiós, mientras lo trasladaban al Cementerio General en Guayaquil.

Su vida bohemia y desordenada ha hecho creer que Julio Jaramillo murió de cirrosis.

Por el contrario, a pesar de que bebía mucho, Julio Jaramillo murió a causa de un paro respiratorio, producido luego de dos operaciones para extirparle cálculos en la vesícula.

Y con esta imagen en la Lagartera, me despido. Espero les haya gustado y conocido un poco más sobre la vida de uno de los más grandes artistas de la música popular que ha tenido el Ecuador.