Nos visitó el próximo beato
Fue hace 26 años que miles de guayaquileños se volcaron a las diferentes avenidas de la ciudad para ver al papa Juan Pablo II, quien visitaba al Ecuador en su gira de encuentro nacional. Llegó a la capital, el 29 de enero de 1985, dos días después arribó al puerto principal donde acudió primero a la iglesia Nuestra Señora de Czestochowa, en la ciudadela Brisas del Río. Allí ofreció una misa y bendijo el santuario, pero un día antes cientos de feligreses adornaron la av. Antonio Parra Velasco con millares de flores, arcos de papel y banderines coloridos hasta llegar a la iglesia, así lo recuerda doña Rosa Gómez, que tenía 35 años y no era creyente pero su curiosidad por conocer al papa fue mayor y se trasladó desde el cantón Milagro. “Nunca había sabido cómo se rezaba, conversé con él (Dios) pero a través del papa yo le pedía y tuve la oportunidad de verlo”, explica doña Rosita, ahora de 61 años, quien sintió una fuerza divina que la convirtió en acercarse a Dios y tener fe. La iglesia