Los pobres... (cojudos)

A 20 días de las elecciones presidenciales y de asambleístas, los candidatos a la presidencia del Ecuador aceleran sus pasos, visitan los lugares que faltan por visitar y prometen cambiar el país en un dos por tres con simplemente sonreír y abrazar a sus posibles votantes y cuyos discursos políticos van dirigidos  a los sectores "pobres" y a aquellos de clase media.

Mientras todos los candidatos ofrecen aumentar el Bono de Desarrollo Humano de $ 35 a $ 50, otros, cual mejor postor, dicen que lo aumentarán a $ 65. Sin embargo, pelean y prometen (porque hablar es gratis)  pero no miden las consecuencias a futuro, todo aumento provoca aumentos. Si sube el bono, subirán los precios para recaudar más dinero en los impuestos y esta medida en vez de beneficiar al sector pobre, serán ellos mismos y la clase media la que más se verá perjudicada. 

Otros candidatos proponen la reducción y eliminación de impuestos, que para ciertos sectores los beneficiará, pero si pretenden aumentar el bono, con reducción de impuestos ¿de dónde sacarán los fondos para poderlo financiar?. El golpe será para la clase media que se verá inmersa en una crisis económica, a esto sumado a la falta de oportunidades laborales, los pobres recibirán "gratuitamente" el Bono, la clase alta tendrá mayores ingresos y con la reducción y eliminación de impuestos, tendrán mucho más. La clase media seguirá estancada y tendrá que automáticamente pasar a la clase baja.

Las propuestas de los siete candidatos (a excepción de Correa) mantienen una similitud en sus propuestas de campaña. Como por ejemplo, aumentar o mantener el Bono de Desarrollo Humano, combatir la delincuencia, generar empleo, combatir la corrupción, endurecer las leyes migratorias, respetar las libertades de los ciudadanos y la libertad de prensa, reducir y eliminar impuestos, entre otras cosas, lo que se convierte en algo monótono a la hora de analizar y elegir al candidato "ideal". No hay una contra propuesta que lo ponga en jaque al Mashi. Mientras sus contrincantes le juegan de igual a igual, Correa seguirá teniendo todas las de ganar.

Lucio Gutiérrez, expresidente derrocado, vuelve nuevamente a querer ganarle a Correa en su tercera carrera electoral. Su discurso berreado de "Con Lucio estábamos mejor...", "Con Lucio no subió esto... o el otro...", ya luce gastado y hasta incrédulo. ¿Para qué querer ganar la presidencia si ya tuvo su oportunidad y la desaprovechó por sus propios errores?. Dice que ha "madurado políticamente" y que ha enmendado sus errores, pero pese a sus 55 años, considero que ya está muy grandecito como para seguir madurando y enmendando errores. En su grupo de candidatos a asambleístas constan personajes de televisión o actores, inexpertos en materia política, que están ocupando un puesto simplemente por imagen que por intelecto racional y legislativo. La idiosincrasia de la gente hará que ciertos grupos sociales cometan el error de votar por ellos.

Mientras que existe un enfrentamiento ideológico entre el pastor Nelson Zavala y Guillermo Lasso, ambos desde el punto de vista religioso. El primero entromete a Dios y oraciones en todos sus discursos, volviéndolo aburrido y hasta curuchupa, mientras que el otro, respetuoso de la concepción humana de principio a fin, defiende la vida a capa y espada lo que provoca una "ira" en ciertos gurpos pro abortistas como por ejemplo, los enfermos del grupo de extrema izquierda, Diabluma. Zavala intenta demostrar un lado "angelical" del Partido Roldosista Ecuatoriano, sin embargo, vía twitter, su líder Abdalá Bucaram suele salir de casillas y explota diciendo cualquier tipo de estupidez en busca de uno que otro retuit de sus populares seguidores. Lasso en cambio lleva la pesada cruz de ser banquero y por ende lo intentan salpicar como uno de los involucrados del feriado bancario en el Ecuador en 1.999 por haber sido superministro de Economía en el gobierno de Jamil Mahuad. Pese a que Lasso es uno de los opcionados para llegar a la segunda vuelta, hay algo en él que a muchos les provoca desconfianza... El tiempo lo dirá...

Álvaro Noboa, quien va por su quinta carrera presidencia, no ha evolucionado políticamente hablando. Su discurso torpe y en muchas ocasiones hasta repetitivo, ha provocado que su partido político se muestre debilitado. No ha hecho nada nuevo por cambiar esa imagen fracasada de sus cinco intentos por llegar al poder, algunos piensan que por ser uno de los hombres más millonarios del país, el dinero no es problema para él y lo despilfarra, aún sabiendo que tiene pocas posibilidades de llegar a una segunda vuelta. Su campaña se centra en entregar regalos, colchones, camas, electrodomésticos, productos agrícolas y de primera necesidad, deja en evidencia una clara desesperación por logar conseguir votos del sector popular.  No seamos ingenuos... 

Mientras que otro de los candidatos que está sumando adeptos es Mauricio Rodas, el candidato más joven de los siete en competencia. Luce como un intelectual preparado, su discurso es coherente, breve y conciso. Es otro de los candidatos considerados fuertes debido a su juventud y equipo nuevo de trabajo, todos sus aspirantes a asambleístas incluso son personas nuevas y jóvenes que intentan dar un giro en la política ecuatoriana con nuevas ideas y propuestas frescas. 

Una vez conocido todo este panorama electoral que se repite en cada campaña, los votantes deberán sufragar con plena convicción, pero previamente, conocer y analizar las propuestas de los ocho candidatos a presidentes. No dejarse llevar por la misma verborrea política que alguno de los candidatos nos tienen acostumbrados a oír, no nos dejemos sorprender por aquellas propuestas que suenan bonito, pero que en el futuro pueden llegar a ser letales para la sociedad ecuatoriana. 

Que los candidatos dejen a los pobres en paz, no los usen como escudos, ni como "prioridades" para su plan de gobierno, al fin de cuentas, todos somos pobres de algo, pero lo más importante no nos convirtamos en pobres cojudos que creen y se dejan convencer fácilmente por cualquier "cuenta alegre", que los candidatos propongan.