Barcelona no pierde la esperanza pero sigue en la cuerda floja

El DT de Barcelona, Gustavo Costas,
tiene la esperanza de que su equipo mejore.
Los resultados del campeón ecuatoriano durante el 2013 son evidentes: 3 puntos en siete partidos disputados; cinco en el torneo local y dos en la Copa Libertadores de América.

La presión de los dirigentes, hinchada y prensa deportiva que pesa sobre el DT Gustavo Costas, sumada a la apresurada búsqueda de una fórmula que cambie esa imagen negativa, ha puesto en suspenso cuál será el futuro del adiestrador argentino y de su club, luego de la derrota como local ante Boca Juniors de 2 a 1.
Los malos planteamientos tácticos, el mal accionar de algunos jugadores y los pésimos resultados obtenidos, son factores que están pasando factura en la actualidad al único ídolo del Ecuador. Los rumores de ciertos pseudoperiodistas deportivos que incitan a desestabilizar a Barcelona para lograr unos cuantos minutos de audiencia y cuestionar el desempeño del técino y dirigencia, ha puesto tenso el ambiente en el cuadro amarillo.
Existen doshipótesis que de hacerse realidad, el futuro del Barcelona Sporting Club estaría corriendo peligro o podría mejorar al menos en esta primera etapa del campeonato ecuatoriano de fútbol.
Una derrota más.-  De ocurrir esto frente al Macará de Ambato (el clásico del astillero quedó postergado a pedido del Emelec), el equipo del 'toño' Noboa estaría hundiéndose más en el fango del fracaso. Esta situación los hinchas la repudiarían y se activaría una "alerta roja" en Barcelona en busca de soluciones que saneen esa mala racha que está atravesando el ídolo. Mediáticamente la prensa deportiva haría leña del árbol caído y por ende el factor psicológico de todo ese grupo que quedó campeón en el 2012 se vería afectado tanto en lo emocional y afectivo, haciendo (indirectamente) que los jugadores no respondan correctamente en el campo de juego al sentir el rechazo y ausencia de sus aficionados.
Damián Díaz mientras festeja su gol en el partido contra Nacional de Uruguay.
Una victoria.-  Si llegase a suceder esto, sería una inyección emocional directa a la vena de los jugadores e hinchada. La esperanza empezará a crecer y los jugadores retomarán esa confianza y respaldo como lo obtuvieron el año pasado. Anímicamente la plantilla torera reaccionará y volverá a entrar en confianza lo que podría producirse lo que muchos llaman "El despertar de un grande". Barcelona solamente necesita ganar un partido jugando bien para que entre en calor de revancha y sea aquel equipo arrollador y goleador como lo fue en el 2012. 

Falta unificar al grupo de jugadores que quedaron campeones el año anterior, se rumora que existen roces entre compañeros y que el camerino está dividido, los dirigentes junto con el cuerpo técnico deberán de buscar la inmediata solución para que Barcelona vuelva a ser esa familia como tanto lo recalcaron la temporada pasada.

La esperanza sigue latente, la fe aún no se pierde, solo están a la espera de que el equipo más grande del Ecuador reaccione y retome la senda del triunfo y la gloria.  Hasta mientras siguen caminando por la cuerda floja que cada vez más está a punto de romperse.

Fotos: El Universo y EFE

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